72andSunny, agencia de publicidad con sede en Nueva York, Los Ángeles y Amsterdam, y el Ad Council, una ONG estadounidense que produce, difunde y promueve anuncios para el servicio público, han puesto en marcha una impactante campaña para concienciar a la sociedad sobre el peligro del consumo descontrolado de opioides. También llamados narcóticos, los opioides son unos analgésicos muy fuertes que pueden provocar dependencia y tolerancia si se administran de forma continuada.

Bajo el lema «La verdad sobre los opioides«, la campaña muestra los tres primeros días de desintoxicación de una joven adicta a los opioides que se prestó a meterse en una habitación acristalada en pleno centro de Nueva York para que todo el mundo pudiera ver su sufrimiento. Y, por si fuera poco, la terrible experiencia también fue retransmitida en directo vía `streaming´.

El resultado de esta acción ha sido un vídeo en el que la propia Rebekkah explica que su adicción empezó cuando el médico le recetó unos analgésicos opiáceos para combatir el dolor producido por una lesión en el tobillo. Cabe señalar que cada 15 minutos muere una persona en Estados Unidos por el abuso de estas sustancias y que la adicción empieza tras cinco días consumiéndolas.

 

 

Durante años, Pablo se hizo la misma pregunta: ¿cómo puede una persona estar tan enganchada a la tragaperras? Se refería a un hombre que veía todas las mañanas en la cafetería donde iba a desayunar. Siempre estaba jugando. Tiempo después se lo volvió a encontrar, esta vez en una terapia de rehabilitación para ludópatas. Ambos eran adictos al juego, con la diferencia de que los 340.000 euros de deuda de Pablo no venían de gastar dinero físico, sino de apostar online, un mercado que atrapa a cada vez más jóvenes y que crece a doble dígito en España, impulsado por unos anuncios que han invadido todos los soportes a la espera de que se apruebe un decreto definitivo que regule su emisión, pendiente desde 2011.

Los anuncios del juego ‘online’ se disparan y los más jóvenes se enganchan

“Pensaba que no era como él”, confiesa Pablo, de 33 años y empleado de banca. Pide usar un nombre ficticio antes de empezar a contar lo poco que tardó en engancharse. Gran aficionado al fútbol, empezó a jugar online con 20 años. “Apostar por internet es muy accesible y extremadamente adictivo”, asegura, en un país donde el 93% de la población ya tiene móvil a los 14 años, según el Instituto Nacional de Estadística. Ahora ve los partidos con cuentagotas y solo cuando ya han arrancado, para evitar tragarse la publicidad de apuestas, que le genera profundo rechazo.

En 2017, se emitieron más de 2,7 millones de anuncios de juego online en todos los soportes, según la consultora InfoAdex, frente a los 128.000 de 2013. Aunque todavía represente un segmento pequeño sobre el conjunto de la industria, el sector digital crece tanto en ingresos como en inversión en marketing, destinada sobre todo a anuncios y bonos, otra estrategia que hace mella en públicos de todas las edades.

“Quienes más sufren este bombardeo publicitario son los jóvenes y los que padecen alguna patología del juego”, comenta Susana Jiménez, psicóloga clínica y coordinadora de la Unidad de Juego Patológico del Hospital de Bellvitge, que cada año atiende entre 350 y 400 nuevos casos de relacionados con la adicción al juego. “Son los más sensibles a iniciarse o recaer con la publicidad”. Según el informe de percepción del juego de la Universidad Carlos III, alrededor de 230.000 personas menores de 35 presentan un “alto riesgo” de adicción en España, y los jóvenes se inician cada vez antes a esta actividad.

La prevalencia de jugadores problemáticos en España es sin embargo tan solo del 0,3%, según los estudios clínicos disponibles. Bayta Díaz es psicóloga en la Asociación para la Prevención y Ayuda al Ludópata (APAL) donde Pablo lleva tres años en terapia. Explica que no existe relación directa entre publicidad y ludopatía, reconocida oficialmente como una adicción del comportamiento sin sustancia, pero señala que los anuncios están dirigidos a aumentar el consumo, y con ello el riesgo. «Es como si vendieran cerveza en un colegio”, ejemplifica. “En el Plan Nacional contra las drogas se habla de consumo como variable de riesgo para desarrollar una patología; igual deberíamos de tenerlo en cuenta con el juego también”.

Un negocio que crece año tras año

El canal virtual se ha convertido en la joya de la corona de un mercado que en su conjunto, sumando el juego físico, mueve menos dinero que hace diez años. En 2017, el segmento online ingresó 560 millones de euros —descontados premios y reapuestas—, cinco veces más que en 2013. Las apuestas deportivas son las grandes protagonistas de esta evolución, según datos de la Dirección General de Ordenación del Juego (DGOJ) y el Consejo Empresarial del Juego (Cejuego), que aclara que, pese a su auge imparable, el negocio digital todavía supone una pequeña parte de la facturación total de la industria.

La ley de 2011 que regula el juego online establecía que se adoptara una norma específica para los anuncios, que todavía no ha visto la luz. De momento, la referencia han sido la Ley General de Comunicación Audiovisual y un código de conducta cuya adhesión es voluntaria y cuya aplicación está supervisada por Autocontrol, organismo independiente integrado por firmas del sector, medios y agencias de comunicación, anunciantes y otras empresas. A finales de 2017, el Ministerio de Hacienda redactó un segundo proyecto de decreto ley —el primero fue en 2015, pero no llegó a aprobarse— que todavía está en tramitación.

Entre otras limitaciones, el borrador prohíbe que se traslade la idea de que el juego se relacione con el éxito personal y profesional, y obliga a incluir la coletilla Juega con responsabilidad en los mensajes, frase que también tendrán que pronunciar los rostros conocidos que protagonicen los anuncios. Asimismo, veda la emisión en horario infantil, tal y como establece la ley audiovisual, prohibición que sin embargo no se está respetando según los datos facilitadas por Infoadex. El texto tampoco tiene la capacidad de regular los anuncios en Internet más allá de los filtros presentes en las redes sociales, confirman fuentes del Ministerio de Hacienda, quienes no concretan una fecha para la aprobación de la norma.

Los anuncios del juego ‘online’ se disparan y los más jóvenes se enganchan

“Esperamos que el decreto no ponga patas arriba el sector”, comenta Miguel Ferrer, portavoz de la Asociación Española del Juego Digital, Jdigital. Ferrer confía en que la regulación final no sea excesivamente restrictiva y que las condiciones sean iguales para todos, también para las Loterías del Estado. “La publicidad y el marketing son la única vía de captación que tenemos porque no contamos con tiendas físicas”, mantiene.

Iconos de los jóvenes

Hibai López, investigador en la Universidad de Deusto, explica que la exposición prolongada al bombardeo publicitario y la elección de deportistas de elite o personajes famosos como protagonistas de los reclamos, a menudo íconos para el público más joven, contribuye a normalizar esta actividad. “Es preocupante. La gente que está en tratamiento dice que es difícil pensar que haya consecuencias negativas si lo promociona una persona a la que respetas”.

Alberto (nombre ficticio) tiene 29 años y hasta hace unos meses nadie de su entorno sabía de su problema con las apuestas. Empezó con 19 años y acumuló 60.000 euros de deuda. “Los anuncios refuerzan la idea de que jugar es normal”, cuenta en la sede de Apal después de salir de terapia. “Soy un apasionado del fútbol desde pequeño y cuando empezaron las apuestas deportivas pensé que había llegado una oportunidad. Ahora me afecta cuando veo anuncios en la tele”.

Solo en los tres primeros meses de 2018, previos al Mundial de fútbol, las empresas gastaron casi el 40% de los 112 millones que destinaron a anuncios en todo 2017, según el anuario del juego de la Fundación Codere, frente a los 70 millones de 2013 contabilizados por la Dirección General de Ordenación del Juego (DGOJ). Esta inversión, en conjunto, supera a la que realizan gigantes como El Corte Inglés, según InfoAdex. “Hicimos un esfuerzo adicional”, asegura Ferrer.

Un voluntario de la asociacion APAL para tratar la ludopatía.
Un voluntario de la asociacion APAL para tratar la ludopatía. Samuel Sanchez

A finales de 2017, el Consejo Audiovisual de Andalucía pidió que se prohibiera cualquier tipo de publicidad de juego online por radio y televisión en horario de protección de menores, tras constatar que varios anuncios se emitieron en esta franja y que en otros casos no se pudo distinguir entre los reclamos y la narración de los locutores durante las retransmisiones deportivas.

Manuel es voluntario en Apal y asegura que en los últimos tres años llegan cada vez más personas de entre 20 y 30 años adictos al juego online, muchos de ellos enganchados a las apuestas deportivas disponibles en cualquier momento en un mundo cada vez más conectado. “Siempre cuentan lo mismo: que es cada vez más rápido”, asegura este hombre de 53 años que también pide usar un nombre ficticio y que hace poco salió del túnel en el que cayó a golpe de apuesta. “Llegas a perder la perspectiva del deporte; para mí se convirtió en algo que ya no disfrutaba”, confiesa.

Diferentes estudios sobre el juego elaborados por la DGOJ y la Universidad Carlos III señalan que alrededor de 900.000 usuarios habían jugado online al menos una vez en junio, y casi un millón y medio se había conectado durante 2017 para hacer apuestas deportivas. Pero son los más asiduos, entorno al 20% los que generan el 80% del beneficio. José Antonio Gómez Yáñez, sociólogo de la Universidad Carlos III, sostiene que los anuncios son muy visibles y deben regularse. “Se tiene que restringir el horario de emisión”, recomienda.

“Es una enfermedad más oculta que otras adicciones” al no tener consecuencias físicas visibles, reflexiona Pablo, quien ha logrado recuperar su vida tras años obcecado por la adicción. “Lo que más me preocupa es que se perciba como algo normal, y los padres no vean mal que sus hijos jueguen”.

https://elpais.com/sociedad/2018/09/11/actualidad/1536676950_651442.html

Sabemos que la interacción social es una necesidad humana básica. Tanto los niños como los adolescentes desarrollan habilidades sociales a medida que crecen para satisfacer esta necesidad natural. Cada vez más y más, nuestros hijos acceden a la tecnología, en forma de redes sociales, para desarrollarse en este aspecto.

Casi todos los adolescentes se conectan a diario y pasan un promedio de dos horas al día en redes sociales. Entonces, ¿qué sucede exactamente durante ese tiempo online? Para muchos, el objetivo es cultivar una marca personal. El objetivo de nuestros hijos y jóvenes es presentar una imagen en línea que los haga parecer interesantes, populares y atractivos. Para las chicas, la necesidad de proyectar estas cualidades parece ser mayor que para ellos.

Esto es posible porque los adolescentes pueden usar sus recién adquiridas habilidades cognitivas de pensamiento abstracto para imaginar cuál será la perspectiva del espectador cuando vea sus publicaciones y perfiles. Esto significa que premeditan lo que otra persona probablemente pensará sobre su publicación de forma anticipada y la editan para que se ajuste a la imagen que quieren que quede patente el espectador. No obstante, pueden sentirse abrumados en la busca de ese fin. Además, puede ser muy difícil cultivar una marca personal que guarde coherencia con sus padres o sus abuelos y también con sus amigos, o el compañero de clase al que intentan impresionar. Para evitar esta discordancia, muchas niñas tienen dos cuentas en la misma red social.

Instagram es una red social de microblogging basada en imágenes con poco texto. Es una plataforma muy visual y muy popular entre pre y adolescentes. Las chicas empiezan primero con lo que se conoce como una cuenta Insta o Rinsta (Real + Instagram). Esta cuenta se cultiva y mantiene para compartir con padres, abuelos y personas con una relación cercana a la familia. La cuenta Rinsta está diseñada para proyectar una imagen que consideran será considerada aceptable dentro de su familia.

La segunda cuenta que las chicas suelen crear se llama cuenta Finsta (Fake + Instagram). Las chicas usan este tipo de cuenta para cultivar una imagen de chica genial, popular o creadora de tendencias. Las publicaciones que hacen en esta cuenta generalmente incluyen contenido que no sería aceptado por sus padres o familiares. La cuenta Finsta está diseñada para amigos cercanos, compañeros y otro tipo de relaciones. Esta segunda cuenta puede variar mucho de la primera cuenta en contenido, imagen y estilo.

Por ejemplo, los adolescentes cada vez publican más fotos con alcohol en las redes sociales. Esto es porque este tipo de imágenes generalmente reciben más me gusta y comentarios, lo cual motiva a nuestros hijos a publicarlas. En casi cualquier red social, los adolescentes etiquetan a sus amigos en la foto para que la imagen esté disponible en los perfiles de las redes sociales de todos. Por esta razón, nuestros jóvenes abren cuentas adicionales que no se comparten con los padres o la familia. Son hiperconscientes de su marca personal dentro de cada cuenta y trabajan diligentemente para mantener su imagen.  Desafortunadamente, mientras ellos piensan que están siendo cautos al tener múltiples cuentas para diferentes públicos, no suelen reparar en los efectos nocivos de este comportamiento.

Los efectos nocivos

En primer lugar, todo lo que se publica en la red es público y permanente. Una vez que se sube algo a redes sociales, la persona que publica la imagen pierde el control. Y peor aún, el resto de personas que aparecen en la foto no tienen el poder de elegir compartir o no compartir la imagen. En consecuencia, la foto se puede copiar, compartir y volver a publicar sin que nadie sepa o pueda detenerla. Por lo tanto, no importa en qué cuenta se publicó originalmente porque puede llegar mucho más lejos.

En segundo lugar, la mayoría de los adolescentes coinciden en que mantener su marca personal en el entorno digital supone un gran esfuerzo. Ellos dedican una enorme cantidad de tiempo en post de la foto perfecta, editándola para eliminar cualquier imperfección, y preocupándose por cómo el espectador la percibirá. La mayoría de niñas y adolescentes experimentan mayor ansiedad, disminución de confianza y menor percepción de su propio atractivo físico después de publicar en redes sociales, independientemente de si han retocado sus fotos o no. Publicar en redes sociales para mantener una marca personal genera efectos psicológicos negativos en todos los niños, preadolescentes y adolescentes, pero es especialmente dañino para ellas.

En tercer lugar, independientemente de que las chicas tengan cuentas de Instagram múltiples, no dejan de ser bombardeadas con imágenes de otras chicas. Algunas de estas fotos aparecen idealizadas, lo que aumenta el nivel de insatisfacción facial y corporal en nuestros adolescentes. Irónicamente, cuando las niñas están expuestas a ver físicos promedio, este efecto negativo no ocurre. Además, múltiples estudios han encontrado y confirmado que el aumento del uso de las redes sociales es directamente proporcional a la insatisfacción corporal tanto de niños como de niñas, y que ver imágenes en las redes sociales aumenta las tasas de depresión especialmente en ellas.

Educar en materia de redes sociales desde una edad temprana

Entonces, ¿cómo podemos nosotros, como padres, ser proactivos para apoyar la necesidad natural de desarrollo de nuestras hijas de socializar con las herramientas modernas que están disponibles a través de las redes sociales, mientras prevenimos los posibles efectos negativos? Educar en materia de redes sociales desde una edad temprana es esencial para prevenir o limitar los posibles efectos negativos del uso de las redes sociales, particularmente imágenes y videos.

¿Qué significa educar en materia de redes sociales? Consiste enseñar a nuestros hijos que lo que ven en la red no es necesariamente cierto. Debemos enseñarles a cuestionar el contenido que ven y a crear su propio criterio para determinen por sí mismos si la información, la imagen o el video son creíbles. Este tipo de pensamiento crítico se puede enseñar de una manera que refleje la capacidad de desarrollo de cada niño.

Para los niños más pequeños y preadolescentes que aún no tienen capacidad cognitiva para pensar de forma abstracta, algunos temas y preguntas que podemos enseñar a nuestros hijos a evaluar las redes sociales pueden incluir:

  1. Explícales cómo la tecnología permite a los humanos manipular y retocar las fotos y videos para mostrar cosas que no son reales. Podemos señalarles esto cuando estamos viendo una película o cuando vemos imágenes en revistas que muestran imágenes de fantasía que parecen muy reales. Esto ayuda a nuestros hijos a entender la manipulación en las imágenes
  2. Háblales sobre el poder del marketing y la cantidad de productos o ideas que se venden tratando de hacernos sentir de cierta manera a través de la manipulación emocional. Podemos señalarles ejemplos mientras vemos anuncios de televisión o vallas publicitarias. Podemos incluirles en a conversación pidiéndoles que nos expliquen cómo les hace sentir y luego preguntarles cómo pueden usar su razonamiento para darse cuenta del marketing implícito.
  3. Enséñales a preguntarse: «¿Alguna vez he visto algo así en la vida real?» O «¿Coincide con lo que normalmente veo?». Esta es una buena manera de inculcar a nuestros niños un escepticismo sobre lo que ven en redes. Hacer comparaciones con la vida real puede ayudarles a detectar cuándo la información no es realista.
  4. Pídeles que describan cómo se ven a ellos mismos o cómo se sienten después de haber estado expuestos a imágenes o contenido de video excesivamente perfectos
  5. Hemos de decirles que son perfectos tal como son y que no es justo compararse con imágenes que no son reales
  6. Finalmente, hemos de asegurarnos de que nuestros niños tengan otras formas de socializar en el mundo real, para que puedan desarrollar hábitos saludables y desconectar de su socialización virtual.

Para los adolescentes, los cuales ya poseen una capacidad cognitiva que les permite pensar de forma abstracta, algunos temas y preguntas que podemos tratar con ellos con relación a las redes pueden ser:

  • Debatir con ellos sobre lo que significa ser una mujer u hombre en la sociedad. No pases por alto el señalarles cómo las mujeres son juzgadas de forma más crítica por sus atributos físicos mientras que los hombres son juzgados más por sus logros. Podemos ayudarles a identificar el sexismo inherente en la sociedad y a ver cómo toma lugar tanto en las redes como en el mundo real.
  • Hazles ver cómo el marketing apela a nuestras inseguridades más profundas para crearnos deseos y necesidades. Podemos explicarles cómo los influencers de las redes sociales se comercializan para fingir que usan o necesitan un determinado producto, cuando en realidad se les paga para promocionarlos. Esto puede ayudarles a entender cómo el marketing manipula las necesidades de los adolescentes y la tendencia que estos tienen de no ser menos que sus amigos.
  • Explícales cómo se les paga a las modelos, actrices, actores y otras celebridades e influencers en redes sociales para ofrecer una imagen perfecta. Su trabajo es verse bien, por lo que deben invertir mucho tiempo, energía y dinero para verse como lo hacen.
  • Debemos hacerles entender que las personas que no son famosas tienen otras habilidades y talentos. De esta forma, entenderán que tener una imagen física perfecta no necesariamente les otorgará felicidad y éxito, sino hacer algo que por lo que tengan pasión.
  • Abrir debates sobre el contenido que ven en redes. Pregúntales quién es popular, qué bloggers están siguiendo, y las cuentas que les inspiran para hacerte una pequeña idea del contenido que están viendo. Hemos de ser abiertos y libres de prejuicios cuando examinemos su contenido, pero debemos señalar sutilmente aquellas fotos que estén retocadas e imágenes poco realistas para ayudarles a ser un poco más escépticos con lo que ven.
  • Hemos de reforzar la belleza y perfección inherentes en nuestros hijos, tanto por dentro como por fuera de manera habitual, para transmitirles tranquilidad y empoderarles. Centrémonos en aquellos aspectos que realmente destacan en ellos y les caracterizan (por ejemplo, la honestidad, la capacidad de trabajo duro, la amabilidad…) que servirán de contrapeso a las influencias negativas que vengan del exterior. Esto también les infundirá confianza para cuando estén asustados, heridos o no estén seguros de si buscar o no ayuda.

Es importante que tengamos en cuenta que este fenómeno de cuentas múltiples no se limita a Instagram, sino que puede suceder en cualquier plataforma o red social. Afortunadamente, como padres, podemos aplicar las mismas recomendaciones anteriores para proteger a nuestros hijos para prevenir algunos de estos efectos negativos del uso de redes sociales.

Deanna Marie Mason, experta en educación y salud familiar. Autora del blog Dr. Deanna Marie Mason. Paternidad proactiva. Apoyo profesional para la familia moderna. Acaba de lanzar su segundo libro: “Cómo educar adolescentes con valores”.

https://elpais.com/elpais/2018/10/17/mamas_papas/1539783345_336670.html

Los móviles y las tabletas no son necesariamente enemigos del estudio. Al contrario, tanto la tienda de Android como la AppStore de Apple cuentan propuestas para volver a tomar el cuaderno y el lápiz con cierta facilidad.

CourseNotes ayuda a tomar apuntes, de los de siempre, pero con complementos multimedia. Permite ordenar por asignaturas, fecha e importancia. Muy práctico pero cuesta 3,99 euros. Penultimate es muy parecido, pero adaptado a los que, aunque sea en pantalla, quieren tener la sensación de usar un bolígrafo sobre papel, reproduce el trazo. Eso sí, es más asequible, 1, 59 euros.

inClass coordina el horario. Incluye alarma para no llegar tarde a clase. Además, no cuesta.

Por 2,39 se puede comprar algo más completo, iStudiezPro: un organizador de deberes, horarios y número de horas dedicadas al estudio.

En Android Market, tanto para teléfonos como para tabletas se encuentran programas similares, uno de ellos es Homework. Los padres que no terminen de fiarse lo que hacen sus hijos con el móvil pueden instalar MySpy, que de manera discreta, hace un llamada que se descuelta. Así podrán comprobar si están en clase o se quedaron en la cama.

Para los que no tienen aparatos de última generación pero sí ordenador, en la Red sobran los recursos. Google tiene algunos atajos que ayudan. Por ejemplo, si se escribe una fórmula matemática en el buscador, dará el resultado. También puede calcular cambios de medidas y monedas con solo escribirlo. «300 kilos en libras» y darle a buscar. En lugar de dar una serie de páginas web, la primera respuesta será la solución. El traductor, por ejemplo, puede ser útil con el latín. Muchas de las lecturas clásicas de secundaria se pueden encontrar gratis en GoogleBooks, dentro de los clásicos.

https://elpais.com/tecnologia/2011/09/02/actualidad/1314954063_850215.html

Casi el 100% del alumnado de los centros del País Vasco sigue trabajando tras estudiar una de las 134 titulaciones ofertadas.

Andrea Belamendia y Garbiñe Prado estudian y trabajan. Después de un curso entero en el centro de Formación Profesional de los Salesianos, en Deusto, Bilbao, ahora alternan las clases en el instituto con un empleo en la empresa Dival de Derio, Bizkaia. Con la ayuda de un instructor están diseñando una báscula de grandes dimensiones y varios detectores de partículas de metales. Además, preparan los exámenes en el instituto. Las dos empezaron una carrera de ingeniería, pero no resultó lo que pensaban. Ahora tocan con las manos lo que fabrican, manejan los programas de diseño más modernos y, cada día, se sumergen en el mundo laboral con proyectos concretos. Ese sistema de aprendizaje se llama FP Dual y combina la formación en el centro con la práctica remunerada y tutelada en alguna de las 1.122 empresas vascas que, solo este año, se han comprometido con el programa. En el curso 2017-2018 han participado 1.913 alumnos de 97 centros formativos públicos, privados y concertados del País Vasco en esta modalidad, de un total de 40.000 alumnos matriculados en FP.

Andrea, 22 años, y Garbiñe, 25, están en el segundo curso de Diseño en Fabricación Mecánica y pasan cada vez más tiempo en las oficinas técnicas de la empresa. “Cada vez vamos más sueltas con los proyectos, la decisión de la FP ha sido un acierto”, reconoce Garbiñe, mientras modela una pieza con el ratón del ordenador. El nivel medio de inserción profesional tras finalizar la FP Dual en el País Vasco es del 87%, que se eleva al 94% cuando se adhieren al programa dual de especialización que incorpora un tercer año, este exclusivamente de formación en la empresa. “Y el restante 6% no se va al paro, es porque sigue estudiando”, advierte al viceconsejero de FP del Gobierno vasco, Jorge Arévalo.

Lo que piden los empresarios

Todo va a ser necesario. El responsable de la patronal vasca, Confebask, Asier Aloria, asegura que el tejido industrial en el País Vasco demanda unos 30.000 empleos anuales, de los que el 50% son de FP, grado medio y superior, y de ellos el 70% están vinculados a la industria, en especialidades como Fabricación Mecánica, Electricidad, Electrónica, Instalación y Mantenimientos e Informática. “Cuando les preguntamos a los empresarios qué valoran en los candidatos, coinciden en que lo primero es la actitud para afrontar tareas diferentes, lo que denominan competencias transversales, y después la formación y especialización que tienen en competencias técnicas”, explica Aloria.

Pero esta demanda laboral creciente no es exclusiva del País Vasco donde la industria representa el 25% del PIB. También se está disparando en el resto de España. Según el último estudio de la Fundación Atresmedia y la Fundación Mapfre sobre la FP, la contratación de titulados en grados medios subió un 17,7% en 2015, los últimos datos disponibles, y entre los superiores un 19,7%. Sin embargo, según ese estudio, España, en comparación con Europa, presenta una notable escasez de cualificaciones intermedias (23,1% frente al 48,9%). “Esta situación presenta sin duda un gran reto para la FP, puesto que este tipo de cualificaciones le son propias”, concluye el informe.

Cabe pensar que esta debilidad tiene los días contados. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha renombrado el Ministerio de Educación como de Educación y Formación Profesional. Curiosamente, la nueva ministra, la socialista vasca Isabel Celaá, fue quien en 2011 implantó la FP Dual en Euskadi, durante el Gobierno de Patxi López. Además, los empresarios están aprendiendo de la versión vasca de este tipo de formación. El pasado día 13 de junio, representantes de los empresarios de diversas comunidades autónomas se reunieron con la patronal vasca, Confebask, en Bilbao, para conocer de primera cómo funciona en Euskadi, donde, por necesidad y por convicción, se ha convertido en un modelo de éxito.

Yeray Varela tiene 30 años. Acaba de terminar la FP Dual de dos años este mes de junio y la empresa en la que seguía su formación, Erreka, especializada en plásticos complejos para la automoción, le contrató al día siguiente. “Es duro, porque llega un momento en el que, entre la formación en el centro, los exámenes y la media jornada en la empresa se hace duro, pero aprendes mucho, y acabas conociendo la empresa muy bien”. Yeray completó el ciclo de Mecatrónica Industrial y se desenvuelve en un entorno laboral de robots y mucha máquina herramienta. “Buscamos este tipo de perfiles con conocimientos de robótica, de Industria 4.0, del Internet de las cosas”, explica Javier Olaizola, el director de negocio de la empresa. “Es un esfuerzo extra porque requiere de un instructor en la planta y seguimiento con el instituto, pero es una inversión y una oportunidad. Atraes al talento a la empresa, redondeas y especializas su formación, y al final tienes la opción de quedártelo”, explica.

Un instructor y un tutor

Cada alumno tiene un instructor en la empresa y un tutor en el centro de estudios. El coordinador de la formación dual del Instituto Miguel Altuna, Alberto Larrea, uno de los centros de referencia enclavado en la comarca del Alto Deba, en la cuna del cooperativismo y de la formación profesional que está en el origen de Mondragón Corporación, explica que, de los 200 alumnos que se matricularon el pasado año en FP, en torno a 100 mostraron interés en la formación dual. Después de un proceso de selección en base al expediente de primer curso y a la actitud que mostraron, 62 de los candidatos lograron un contrato laboral para seguir su formación en las empresas. “Empezamos hace siete años con dos”, recuerda satisfecho.

La única financiación pública que reciben las empresas asociadas se eleva a 2.000 euros anuales por cada contrato —a través del Servicio Vasco de Empleo Lanbide—. La ayuda está destinada a compensar a la empresa por las horas que los instructores dedican a cada alumno.

“Cada estudiante es un proyecto”, afirma Larrea. Antes de comenzar la formación en la empresa, esta nombra a un instructor con el que planifican un programa ad hoc para cada alumno, con un itinerario formativo en la empresa y un calendario laboral. El tutor visita al alumno en la industria al menos cuatro veces durante el curso, pero además le evalúa con el instructor cada mes y entre ambos le puntúan. “El instituto aporta el 75% de la calificación y la empresa el 25% restante en base a las competencias técnicas adquiridas y otros parámetros como la capacidad para trabajar en equipo, limpieza y orden en el puesto de trabajo, e iniciativa”, completa Larrea.

Amplio catálogo de títulos

La oferta vasca de FP es de 134 titulaciones en 22 sectores diferentes y con varias modalidades. La mayoría son industriales, pero cada vez cobran mayor importancia los servicios y el sector primario. El catálogo para el próximo curso se puede consultar en la web del Gobierno vasco.

En el ciclo dual de dos años —entre 2.400 y 2.800 horas— los alumnos pasan entre 800 y 1.200 horas en la empresa. En los ciclos de tres años se puede llegar a 4.700 horas, de las que entre 1.800 y 3.100 se invierten en la empresa, el tercer año íntegro. Existe una última modalidad denominada FP Dual to the World. “Los alumnos continúan su aprendizaje en empresas fuera de España”, remata Arévalo.

Rocío Romero, estudiante de FP Dual en Bergara.
Rocío Romero, estudiante de FP Dual en Bergara. Javier Hernández

El próximo curso comenzará la séptima promoción de FP Dual en Euskadi. Durante este tiempo se han formado 4.719 alumnos en 2.969 empresas, en torno al 12% de quienes se matricu­lan en FP y el interés de los alumnos crece a un ritmo anual de dos dígitos. Saben que las empresas asociadas, que les cogen con contrato de aprendizaje, asumen que no son trabajadores sino que están aprendiendo. El regulador es el Consejo Vasco de la FP, en el que concurren el Gobierno vasco, la patronal y los sindicatos UGT y CC OO y vigila para que el seguimiento de cada alumno sea individualizado. “El consenso es una garantía para seguir avanzando en este tipo de formación y para seguir mejorando y revisando los itinerarios formativos”, sostiene el viceconsejero vasco.

“Intentamos además no dejar descolgado a nadie”, precisa Julen Elgeta, el presidente de Hetel, la asociación de centros de FP vascos. La gran mayoría de los alumnos que eligen dual firman un contrato de formación y aprendizaje, pero este tipo de contrato excluye a los mayores de 30 años, tampoco es aplicable si la actividad de la empresa requiere turnos o nocturnidad, como panadería o repostería o restauración, y también está excluido si el tipo de formación no está en el catálogo del Sepe. “Cuando no se puede aplicar, las empresas conceden una beca al alumno en las mismas condiciones que el contrato. Intentamos que nadie se quede atrás en su proceso de formación permanente”, explica. La única diferencia es que la beca no genera derechos en materia de desempleo, pero iguala al contrato en remuneración —no puede ser menor del SMI— y en el resto de obligaciones con la Seguridad Social. El 75% de los contratos son de formación y el 25% restante se hace con becas en el País Vasco.

Rocío Romero tiene 30 años. Y se salvó por unos días de tener que hacer la formación en la empresa con una beca. Estudió ingeniería técnica en Obras Públicas en Córdoba pero no encontró trabajo y, en plena crisis, y decidió matricularse en el ciclo de FP de Automatización y Robótica industrial. La empresa en la que acaba de terminar su formación, IDS de Bergara, especializada en soluciones informáticas para empresas, le ha contratado. “Ahora no cambio esto por nada”, dice agradecida a sus profesores, tutores e instructores. “Te lo tomas en serio porque mucha gente se lo toma en serio para que tengas una oportunidad”, dice convencida.

Extenderse a la universidad

Andrea Belamendia y Garbiñe Prado, en la empresa donde trabajan en Derio, Bizkaia.
Andrea Belamendia y Garbiñe Prado, en la empresa donde trabajan en Derio, Bizkaia. Javier Hernández

Las tres universidades vascas, la pública UPV (Universidad del País Vasco), Mondragon Unibertsitatea, y Deusto, ya han actualizado su oferta para extender, también en las licenciaturas y máster, el concepto de formación dual en alternancia. Los ciclos de cuatro años serán dos en las facultades y otros dos en alternancia con contrato en el seno de la empresa. A partir del próximo curso 15 grados y siete másteres, la mayoría en ramas de ingeniería, contarán con el sello de formación dual, en la que 371 alumnos harán un mínimo de horas remuneradas en las empresas al mismo tiempo que estudian en las facultades.

De las tres universidades vascas, Mondragón es la que mayor oferta tiene: 10 grados y cinco másteres. Además de los relativos a las ramas de ingeniería, también cuenta con títulos de Administración de Empresas, Tecnologías Biomédicas y Diseño Estratégico de Productos y Servicios.

La UPV contará con cuatro grados y dos másteres de formación dual con grados como Ingeniería de Automoción, Ingeniería en Innovación de Procesos y Productos, Administración de Empresas y Relaciones Laborales y Recursos Humanos y los másteres de Ingeniería de Sistemas Empotrados y Periodismo Multimedia.

Por su parte, la Universidad de Deusto dispondrá este curso de un grado dual en Relaciones Laborales.

Si en titulaciones Mondragón se impone, también lo hace, aunque no con tanta diferencia, en el número de alumnos que el año que viene seguirán el itinerario dual para completar su licenciatura. Su oferta es de 204 plazas, mientras que la universidad pública cuenta con 157 y Deusto, 10. «Es el comienzo, lo más difícil. Ahora ya, a crecer y mejorar», dice Asier Aloria, de la patronal vasca. La oficialización de las titulaciones es, en parte, un reconocimiento al modelo que ha impulsado desde sus orígenes el grupo cooperativo vasco cuyos alumnos, que compatibilizan teoría y práctica, logran una empleabilidad del 80%.

https://elpais.com/economia/2018/07/06/actualidad/1530870962_901515.html?id_externo_rsoc=FB_CM


Laurent Simons , un niño de 8 años, de Bélgica, acaba de recoger su diploma de graduado en lo que equivaldría al Bachillerato en nuestro país rodeado de familiares y otros estudiantes, de 18 años, y está a punto de entrar en la universidad .
El niño belga ha logrado graduarse en la escuela secundaria a la edad de 8 años después de completar seis años en aproximadamente 18 meses. Su siguiente paso es entrar en la universidad, pero lo hará en septiembre, después de pasar dos meses de formación.
Según explicaron sus padres a la radio belga RTBF, el menor tiene un coeficiente de inteligencia de 145 , lo que ha facilitado a terminar sus estudios antes de tiempo. De acuerdo con la declaración de sus progenitores, el niño ya apuntaba maneras de pequeño cuando sus padres empezaron a notar que no tenía mucho interés en los juguetes y le costaba relacionarse con otros niños de su edad.
Si se le pregunta por su asignatura favorita , Simons no tiene duda: las matemáticas y la explicación es sencilla: «porque es muy amplia, hay estadística, geometría, álgebra…».

De momento, baraja decantarse por seguir una carrera como cirujano, astronauta o algo relacionado con la informática , pero a sus padres esto no les supone una gran preocupación. «Si decide mañana convertirse en carpintero, eso no supondría un problema para nosotros, siempre y cuando él sea feliz», dijo su padre a BBC .

http://www.europapress.es/desconecta/curiosity/noticia-nino-prodigio-anos-comenzara-universidad-despues-completar-estudios-18-meses-20180703115035.html

Me duele la mano. Desde hace días. Concretamente, los dedos. El dolor se vuelve intenso cuando sostengo el móvil, cosa que hago 16 de las 24 horas que tiene el día. Hace días que lo pienso. Y entonces el móvil se calienta. Debe ser por su uso intensivo. No es normal. Algo le pasa. Y entonces pienso en la niña de dos años, que ya me roba el móvil para ver Bebé jefazo o Pocoyó. Sube y baja los vídeos de YouTube como si nada. A ella también se le calienta el teléfono. A los cinco minutos el aparato arde. No es normal. Es el aparato que me proporciona la empresa, vaya por delante y sin querer insinuar nada.

Mientras pienso en el dolor de mis dedos, oigo a otra madre que dice: “No deberías dejarle el móvil, provoca autismo”. Le quito el móvil. Y pienso en que queda muy poco para que la mayor, de 12, tenga uno de estos aparatos. Ya lo pide. Insistentemente, cada día. Sabe el modelo y el color que quiere. Desde hace años. Evidentemente, es uno muy superior al mío. Le he propuesto uno de prepago, sin Internet. Pero, ¿qué le voy a decir… si no deja de verme a mí siempre enganchada al móvil? Miro Twitter, y veo uno que dice: “Respiramos oxígeno, nitrógeno y WiFi”. Así estamos.

Eton College confisca el móvil de sus alumnos por la noche

En España, uno de cada tres niños de 10 años tiene móvil. En el caso de los de 13, el 78,4%, y entre los de 15, el 90%, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) de 2014.

¿Qué estamos haciendo? Y ¿qué estamos enseñando? La gestión familiar del móvil es complicada. Lo cuenta Maria Pi-Figueras, madre y médico, que, como otros muchos de la generación del fijo, reflexiona: “En nuestra época, sin tanto avance tecnológico, jugábamos en la calle y en los parques, y lo pasábamos bien”. Parece que eso no basta hoy en día. Entre las últimas noticias, Francia anuncia que prohibirá los teléfonos en los institutos. Pero no se asusten. El corresponsal de EL PAÍS en París, Marc Bassets, me cuenta: “La novedad es que la prohibición es la norma, y que cada escuela podrá aplicarla como considere mejor y hacer las excepciones, sobre todo para usar las tecnologías con finalidad pedagógica”. Eton College, famoso internado de niños en Reino Unido, ha decidido “confiscar” el móvil de sus alumnos por la noche. Simon Henderson, el director del internado, asegura en declaraciones a The Guardian: “Pensé que los chicos se pondrían furiosos, pero en realidad la medida ha sido muy bien acogida”.

Pues si hay normas en la escuela, ¿por qué no establecerlas en casa? ¿Si hay normas y horas para ver la tele, por qué no para ver el móvil?

“Hemos perdido la batalla”. Lo dice el juez de menores de Granada, Emilio Calatayud. Sus declaraciones hace menos de un año en un programa de televisión causaron cierto revuelo. Así lo explicaba a este diario: “He dicho, hablando de los peligros que pueden encerrar las redes sociales para los menores, que hay niñas que se fotografían como putas y luego suben esas fotos a las redes sociales. Olvidé decir, pero lo digo ahora, que también hay niños que hacen exactamente lo mismo”. Coge el teléfono a esta periodista y bromea: “Espera, que estoy abriendo el ordenador y no me aclaro con las nuevas tecnologías”. Señor juez, ¿cuándo hay que comprarle el móvil a un hijo? “Siempre digo que la edad buena es la edad en que se lo pueda pagar. Es una barbaridad que niños con 12, 10, 8 años, tengan móvil”.

Calatayud aboga por establecer una edad mínima, 14 años, y que todos los móviles incluyan en su letra pequeña los perjuicios que pueden ocasionar, como los paquetes de tabaco. Consumir este aparato a edades tempranas provoca, según el juez, tres problemas: “Primero, es una droga. Si al despertarte lo primero que haces es mirar el WhatsApp, es que está enganchado. En segundo lugar, es un instrumento muy peligroso para cometer delitos. Todo trasciende a las redes, a un público amplísimo. Y una tercera cuestión, es un aparato muy sencillo para convertir a alguien en víctima de un delito”. Calatayud es pesimista: “Hemos llegado tarde”. Y cuando se le insinúa, con voz tímida, que se le da el móvil pronto para que el niño/niña pueda ir solo por la calle, responde tajante: “Pero si los niños de hoy están más localizados que el ministro del Interior. Yo prohibiría el móvil en los colegios, pero también en las Cortes”. El juez participó hace unos días en una charla con 70 chavales de 8 años, solo tres no tenían teléfono. “Así estamos”. Además de insistir que la clave es la EDUCACIÓN en mayúsculas, el juez ironiza sobre un futuro esperanzador: “Como el móvil de última generación es el regalo estrella en las comuniones y ahora vamos a ser laicos, igual…”.

Antes de acabar, Calatayud, que tiene un blog con el periodista Carlos Morán, lanza un último consejo: “Los padres tienen que violar la intimidad de sus hijos”. Si antes los padres miraban los bolsillos del pantalón o registraban los cajones, ahora tienen que revisar cada día el contenido del móvil. Y, sin embargo y pese a todo, ahora me toca lo peor: ¿Le compro o no le compro el móvil? A la de 12 años, claro.

https://elpais.com/ccaa/2018/06/22/catalunya/1529673884_123066.html?id_externo_rsoc=FB_CM

“Ojos que no ven” es nuestra campaña de prevención del inicio del consumo de alcohol en menores.

https://youtu.be/q1i64zTE6e4

“Ojos que no ven” es una campaña de prevención del inicio del consumo de alcohol en menores de Asociación Dual que denuncia precisamente eso: nunca se puede bajar la guardia.Las vacaciones de verano son un momento crítico en el inicio del consumo del alcohol para los adolescentes. Las fiestas de los pueblos, las peñas, el entorno más seguro y familiar origina que los padres se relajen.En vacaciones es frecuente además que los padres sufran la presión de otros familiares o amigos para que dejen mayor libertad a sus hijos adolescentes.Los últimos datos del Plan Nacional sobre Drogas muestran que aumenta el número de jóvenes que consumen alcohol aunque se retrasa la edad de inicio hasta los 14. Hay medidas como sancionar a los padres que han sido muy polémicas.

El psicólogo y director técnico de Asociación Dual, Raúl Izquierdo, ha avisado, con motivo del lanzamiento de la campaña ‘Ojos que no ven’, de que las vacaciones de verano son un «momento crítico» en el que muchos jóvenes se inician en el consumo de alcohol.

Desde las clásicas fiestas de los pueblos hasta las peñas, los chiringuitos de playa o celebraciones donde el alcohol es protagonista, el periodo estival favorece que muchos jóvenes menores debuten en el consumo de alcohol o reincidan si lo han probado el año anterior.

«Los padres no pueden relajarse en vacaciones por más que interpreten que el entorno donde veranean es más seguro y familiar que la ciudad, precisamente es al contrario: hay que aumentar la guardia», ha destacado el psicólogo.

En este sentido, desde Asociación Dual han abogado por el diálogo «sincero, claro y honesto» entre padres e hijos sin perder la firmeza. Y es que, tal y como ha recordado, el menor no debe elegir los riesgos que asume, sino que son los padres los que deben ejercer la función de administrar su exposición a estos, cumpliendo con su obligación de ser garantes de la seguridad de sus hijos menores.

En ese sentido, la propuesta del Proyecto de Ley contra el consumo de alcohol contempla la posibilidad de sancionar a los padres de jóvenes que sufran varios comas etílicos lo que supone, a juicio de la organización, una «inequívoca» forma de llamar la atención sobre un problema que es «enormemente grave».

Otra medida defendida por Asociación Dual es sancionar a los establecimientos que venden alcohol a menores. «Hay que ser muy tajantes con estos negocios. El proyecto de ley plantea el cierre por reincidencia, nosotros creemos que no hay que esperar a la reincidencia y proceder al cierre cautelar en cuanto se dé el caso», ha dicho Izquierdo.

No obstante, ha lamentado que haya una «cierta tibieza» entre la población general a la hora de denunciar a estos establecimientos, avisando de que esto no ocurrió con los bares que se declararon en rebeldía contra la Ley del Tabaco. CAMPAÑA DE PREVENCIÓN ‘OJOS QUE NO VEN’

En el spot de la campaña se ve a una joven que termina de hacer los deberes en su habitación, queda con sus amigos a través de un grupo de mensajes de móvil, mientras su padre prepara algo de cena.

Tras esto, cambia el uniforme del colegio por ropa de calle, se maquilla y se marcha haciendo un gesto que los padres no perciben porque están distraídos cenando. Junto con sus amigos, la joven compra alcohol en un comercio del barrio y todos juntos se marchan a un parque a hacer botellón.

Entre tanto los padres ven la televisión y se acuestan. Acto seguido se pueden apreciar los desperdicios que la reunión juvenil ha dejado tras de sí. Mientras, en la habitación de los padres, ya dormidos, entra una llamada de los servicios de emergencia 112.

«Hemos querido dirigirnos principalmente a los padres, tutores o adultos referentes de los jóvenes, sin olvidar el resto de agentes y elementos implicados en esta problemática: el grupo de iguales, los responsables de los comercios que venden alcohol a menores, las redes sociales, y en concreto las aplicaciones de mensajería instantánea, así como la transformación de los hábitos de vida de jóvenes y adultos», ha zanjado el director técnico de Asociación Dual.

Puedes descargarte el vídeo en alta calidad en el siguiente enlace: https://video4.europapress.net/ep/H264/398000/398260_1_21.mp4

O acceder a nuestro canl de youtube:

 

 

Nuestra noticia está siendo muy arropada en los medios, aquí te ponemos los enlaces de algunos de los medios que lo han compartido:

http://www.europapress.es/videos/video-asociacion-dual-alerta-inicio-consumo-alcohol-adolescente-verano-20180620094002.html

https://www.centralcharts.com/es/news/1566440-asociacion-dual-alerta-del-inicio-de-consumo-de-alcohol-adolescente-en-verano

A finales de mayo y principios de junio de cada año, una realidad sé presenta a los estudiantes que acaban Bachillerato: ¿qué camino de estudios tomar tras la Evaluación para el Acceso a la Universidad (EvAU)? La falta de un consenso legislativo e institucional entre todos los agentes implicados en España desde la década de los ochenta, también repercute en esa cruda circunstancia. Los bachilleres españoles, sobre todo del Sistema Público, carecen de orientadores y maestros que a modo de consejeros les orienten sobre ello.

Los miles de psicopedagogos que hay en los IES -uno por centro- son insuficientes porque no dan abasto entre sus múltiples tareas, así lo confirma la profesora Gracia Vinuesa, con más de 30 años de servicio en institutos públicos de Secundaria, Bachillerato y Ciclos Formativos en Castilla y León y la Comunidad Valenciana, “¿qué facilidades les damos? Muy pocas en la enseñanza pública porque por centro hay un psicopedagogo que debería informarles, pero como el alumnado es súper amplio, no da abasto y no tiene tiempo para ver qué capacidades tiene mejores cada alumno, en qué sé encontraría más cómodo. Sé que en centros concertados en Palencia sí que ha habido un seguimiento más personal a la hora de facilitarles salidas en función de sus cualidades. En la escuela pública sé les lleva un día a la Universidad de Palencia o a la Universidad de Valladolid para que les den pequeñas charlas y vean la carrera que les gustaría hacer, y que les cuenten desde dentro, pero está muy limitado. Si a un chaval le gusta Medicina, va solo a la charla de Medicina y el resto de charlas no las escucha”.

¿Cómo viven los jóvenes este horizonte? ¿Qué tipo de orientación necesitan para continuar con su formación?

Inés Ruiz, que acaba de terminar Bachillerato en el IES Antonio Machado de Soria, expresa las incertidumbres de su generación: “Considero que debían de orientarnos de forma más amplia con una orientadora sobre qué podemos hacer con nuestro futuro. Qué vamos a estudiar, no solo la Universidad, hay más opciones y no nos las dicen. El Instituto orienta en que tenemos que hacer la carrera que más nos guste, pero hay personas que o no sé lo pueden permitir o no quieren hacer eso. La mayoría de mis compañeros quieren hacer una carrera e irse a estudiarla a Madrid. Y las dudas que suelen generarse son si lo que van a estudiar es lo que quieren y si realmente van a poder, dependiendo de la nota de la EvAU.”

La nota de corte desde que fue implantada hace décadas para acceder a unos estudios universitarios en numerosas ocasiones sé convierte en otro lastre: corta vocaciones. ¿Qué piensan los bachilleres sobre ese método de selección?

Para Ruiz entiendo que la nota de acceso sea de un nivel mínimo y que el acceso a esa carrera tenga que tener un cierto control, pero sí que considero que cada año están complicándolo más y nos reducen más las oportunidades y opciones que tenemos.”

Desde las universidades públicas españolas, salvo honrosas excepciones, tampoco sé hace mucho por despertar y cuidar esas vocaciones nacientes. Así lo confirma Vinuesa: “Sí, que alguna vez han venido de alguna Facultad de Palencia pero sobre todo para asegurar una cantidad de matrículas no porque a los chavales les interese lo que les ofertan. Y los han llevado una vez, pero solo a algo muy concreto y cerrando las posibilidades a pensar otras cosas.

¿Qué debate es necesario realizar entre centros educativos, asociaciones de padres y madres, Administraciones Públicas, alumnado y empresas?

La falta de tiempo y el acelerar los plazos repercuten en perjuicio de los estudiantes. Ruiz habla con rotundidad sobre “lo que nos proponen ¿creen realmente que es algo que se pueda sacarlo de una manera humana? Este año por primera vez sé ha acortado en casi 15 días para prepararnos la EvAU. Es un tiempo indispensable y necesario, ni mis compañeros ni amigos sabemos cómo podremos afrontarlo porque acabamos el Bachillerato con estrés y cansancio considerable, y nos metemos en una prueba complicada con 10 días de estudio. Creo que se solucionaría un poco más la vida con tiempo porque lo necesitamos para hacer bien las cosas.”

En esta sociedad de hoy, excesivamente acelerada, las prisas afectan para mal a la mayoría. Repercute a diario en la calidad de vida y en esa posibilidad que reclaman los adolescentes de hacer bien cada tarea. Por eso es necesario un debate nacional que de respuestas coherentes, inteligentes y responsables a esta cuestión: ¿qué Pacto Educativo necesita España para las próximas generaciones?

Con el conocimiento que dan los años de experiencia y las tomas de decisiones dentro del sistema público, Vinuesa propone“cuando ha terminado el chaval la ESO no orientar a que todo el mundo vaya a Bachillerato porque no creo que sea la mejor salida por cómo está orientada nuestra sociedad. Hay gente que no tiene capacidades para enfrentarse con una carrera o hacerla por la inercia de que mi padre quiere que haga esto: eso lo hacen muchos.”

Junto a esa realidad, Vinuesa sugiere otros caminos “otra buena salida sería también orientarlos a sus competencias manuales para que desarrollen sus capacidades en los Grados. He tenido una alumna que sé ha pasado cuatro años en Bachillerato porque los padres querían. Y ella quería hacer un Ciclo Formativo de Grado Medio de asistente farmacéutica, al final lo ha conseguido y está estudiando encantada, y ha perdido tres años de su vida por complacer a los demás. Hay que preguntarles qué les gusta, qué no. Con qué capacidades se ven. Cuántos años se ven estudiando.”

Los jóvenes no solo requieren formación en competencias y profesiones, también necesitan educación emocional como atestigua Ruiz a nivel emocional creo que mucha comprensión y apoyo porque muchas familias creen que lo que hacemos no es tan difícil y que lo ha hecho todo el mundo, pero no en las mismas condiciones, porque cada día se van complicando más. Necesitamos mucho apoyo porque muchas familias exigen y no comprenden al adolescente que tienen al lado.”

Esta es la realidad de los bachilleres españoles, ¿qué sucede en otros países europeos de nuestro entorno? Desde hace años en Dinamarca, sus bachilleres al completar esta etapa tienen dos años por delante para ir a otro país, aprender o perfeccionar esa lengua, conocer esa cultura de vida y trabajar en los empleos que les salgan para afrontar los gastos. Pasado ese tiempo, su país les permite ingresar en los estudios universitarios u otros que elijan una vez madurado qué quieren hacer.

¿Qué les parece esta opción a la bachiller Ruiz y a la profesora Vinuesa?

Para Ruiz, que sé ha informado de esa práctica, “además de ser una muy buena opción para que el estudiante durante un cierto periodo de tiempo se relaje y pueda ver otras cosas, a la vez es una manera de ganar dinero porque no todas las familias al terminar el Bachillerato se pueden permitir el ingreso en la Universidad sin ningún tipo de problema económico. Es bueno que el estudiante a la vez mejore un idioma, trabaje para ayudar a su familia, y descubra otro mundo. No es un año sabático, es un año de meditación y aprendizaje, y es una opción que valoro para mi futuro.”

Desde la óptica de Vinuesa, la joven alega: Me parece muy bien porque una persona con 18 años no tiene su cabeza formada para tomar una decisión tan importante para su vida. Esa decisión la puede cambiar cuando quiera. Es estupendo que se formen en lenguas, y que salgan de sus casas y se sepan manejar. Esas cosas son más importantes que las habilidades que les estamos inculcando de memorizar y ser <<ratón de biblioteca>>, y no tener una aptitud para saber rellenar una instancia, irse a un piso y saber poner una lavadora, para pagar un recibo, y encontrar y enriquecerse con otras culturas.”

La cuestión económica también repercute en las opciones con las que pueden o no contar los bachilleres españoles. Como apunta Vinuesa “en Dinamarca me imagino que tendrán un respaldo económico para los estudiantes, aquí no lo hay. Si no lo hay, el dinero sale del bolsillo de sus padres, o de fregar platos que no sé si es muy enriquecedor y productivo.”

¿Qué otras preocupaciones tienen nuestros bachilleres sobre su porvenir?

Ruiz, describe los asuntos que preocupan a su generación, “las relaciones entre profesorado y alumnos. El profesorado no entiende al ballicher. Sí, debemos estudiar, pero tiene que ser compatible con vivir. Son personas que nos están inculcando ciertas materias y ellas han estado en la misma posición que nosotros ahora, pero no empatizan con nosotros suficientemente. Nos exigen unas cosas que ellos ven que son muy complicadas y no se dan cuenta de que tenemos vida más allá del IES o de cualquier otro tipo de Educación».

Tras conocer la mirada de la estudiante, es preciso conocer la perspectiva de la profesora, ¿qué otros asuntos tienen en mente los docentes respecto al alumnado?

Vinuesa ofrece una reflexión profunda, “no dar importancia a tener una carrera universitaria porque la vida te pide muchas otras cosas. Y en caso de que quieras hacer una carrera universitaria estar bien asesorado por un buen equipo en tu centro, que ahora no hay, no tenemos psicopedagogos suficientes. Primero, el Bachillerato no es la panacea. Segundo, tener personal formado para que te oriente. Tercero, el año sabático para madurar tus ideas».

Hay personas que se leen hasta la letra pequeña de los manuales mientras que otros se lanzan a pulsar todos los mandos para ver qué ocurre. No es ni bueno ni malo. Simplemente, nos da pistas de nuestra manera de aprender. Veamos los cuatro tipos de aprendizaje que existen para identificar cuál es el tuyo.

Quieres hacer un viaje con tu pareja y uno de vosotros necesita leer hasta el mínimo detalle sobre el sitio a donde vais, mientras que el otro se pone de los nervios porque preferiría lanzarse a la aventura. O en una reunión de trabajo un compañero no para de dar ideas sin concretar nada, mientras que a otro le agobia no trabajar en una sola. ¿Has vivido algo de esto? Si es así, bienvenido a los diferentes modos de aprender y a sus dificultades (y oportunidades).

En 1984 un profesor universitario, David Kolb, descubrió que los adultos tenemos distintas maneras de aprender que dependen de cómo percibamos la realidad y de cómo la procesemos. Hay personas que captan la realidad fundamentalmente a través de la experiencia y otros, creando teorías. Los primeros son más empáticos y tienden a hacer varias tareas al mismo tiempo (multiplicidad). Es más, si no lo hacen se pueden aburrir soberanamente. Los segundos prefieren centrarse en una sola tarea, se manejan muy bien en la teoría y se perderían con varias cosas al mismo tiempo (unicidad).

No todos captamos la información igual: algunos la procesarán si se ponen manos a la obra (acción) y otros si reflexionan sobre lo que observan (pensamiento).

Con respecto a la manera de captar la información, algunos la procesarán si se ponen manos a la obra (acción) y otros si reflexionan sobre lo que observan (pensamiento). Pues bien, las anteriores características definen los ejes de las maneras de aprender y de los cuatro estilos. Veámoslos con algo más de detalle:

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Adaptadores o los “hacedores”

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Difícilmente leerán un manual. Son el resultado de la multiplicidad y la acción. Prefieren trabajar rodeados de personas y se buscan la vida para conseguir recursos y alcanzar resultados. Les gusta asumir riesgos y saben adaptarse a las circunstancias. En una empresa abundan en los departamentos de ventas. Y la pregunta clave que necesitan contestar es ¿cuándo?

Asimiladores o expertos en la conceptualización

Su estilo es opuesto a los adaptadores. Son extraordinarios creando modelos teóricos y definiendo claramente los problemas. Les interesan más las ideas abstractas que las personas, por lo que no es de extrañar que destaquen en el campo de las matemáticas o de las ciencias. En una empresa pueden estar en posiciones de investigación o de planificación estratégica. Y la pregunta clave que necesitan contestar es ¿por qué?

Divergentes o los reyes de las mil y una ideas creativas

Todos tenemos un estilo de aprendizaje definido pero para desarrollarnos mejor personal y profesionalmente conviene estar con personas que nos complementen y cuyo estilo esté en el extremo del nuestro.

Disfrutan analizando los problemas en su conjunto y trabajando con personas. Son empáticos, emocionales y ocurrentes. No es de extrañar que lancen un sinfín de propuestas diferentes en una reunión. En este estilo se encuentran artistas, músicos y todos los creativos en el mundo de la empresa. Y la pregunta clave que necesitan contestar es ¿y si…? o ¿por qué no?

Convergentes o el poder de la aplicación en una sola cosa

Son los opuestos a los divergentes. Necesitan la aplicación práctica a las ideas para testar teorías o resolver problemas. Se pierden con muchas alternativas. Sin embargo, son excepcionales en situaciones donde haya un único camino para ser resueltas. Muchos ingenieros se enmarcan en este estilo de aprendizaje. Y la pregunta clave que necesitan contestar es ¿para qué?

Como es de imaginar hay personas cuyo estilo de aprendizaje está más marcado que otros como, por ejemplo, Sheldon Lee Cooper, protagonista de la serie The Big Bang Theory, quien es un asimilador total. Lo normal es que no sea así y que todos tengamos un poco de los cuatro aunque nos solamos sentir más cómodos con uno.

En definitiva, todos tenemos un estilo de aprendizaje que nos define más que otros y para desarrollarnos mejor en lo personal y profesional sería recomendable estar con personas que nos complementaran y cuyo estilo estuviera en el extremo del nuestro. Por ello, si eres de los que no lees los manuales, estáte cerca de quienes disfrutan haciéndolo (o viceversa). Porque más allá de este hábito, existe una manera interna distinta de percibir y de procesar la realidad que te puede ayudar a mejorar y a superarte a ti mismo en muchos otros ámbitos de la vida.

http://elpais.com/elpais/2016/10/10/laboratorio_de_felicidad/1476119828_530014.html?id_externo_rsoc=FB_CM