La iluminación es determinante a la hora de crear ambientes y la navidad es el mejor referente de ello. ¡Qué calidez y magia dan esas pequeñas bombillas que inundan las calles, los escaparates, las casas o los belenes! En este post proponemos disfrutar de esta iluminación al máximo en estas fiestas que vienen pero no guardar las pequeñas luces después sino aprovecharlas a lo largo del año para mantener su magia y calor, sobretodo en las habitaciones infantiles.
En la mayoría de los casos estas luces son muy tenues y cumplen principalmente una función decorativa, también ayudarán a quitar el miedo a la oscuridad de los niños o como lámpara de noche. Os mostramos algunas ideas…
Podemos hacer divertidas formas con las guirnaldas de luces, como esta luminosa nube.
O esta estrella:
¡Un corazón de luz!
Entorno al cabezal proporcionará una agradable luz muy suave que nos permitirá crear una atmósfera ideal para contar cuentos. Para leer, sin embargo, iremos un poco más justos.
¡Es una idea muy buena para la literas!
¿Qué os parece aprovechar el cable de las guirnaldas de luz para colgar fotos?
Lo que veis a continuación es lo que NO nos gusta porque nos parece un “cacao muy peligroso”. Conclusión: nada de cuerdas al alcance del bebé, especialmente de la cuna que es donde suelen estar sin ninguna vigilancia. La imagen corresponde no a una habitación infantil sino a una exposición en de producto en una tienda.
¡Qué ambientes tan maravillosos e íntimos se crean con estas pequeñas luces! Si en una cena romántica no faltan las velitas, en una fiesta donde los niños se quedan a dormir no pueden faltar las luces de navidad. ¡Cabañas o tepes también son obligados!
Los niños disfrutarán pudiendo iluminar sus propias construcciones.
¡Hasta un pasillo se puede iluminar y llenar de magia!
http://kidsmopolitan.com/luces-de-navidad-para-todo-el-ano/